30 de marzo de 2012

El primer añito de mi pequeña

Hoy mi pequeña hermosa cumple su primer añito! Un añito regalandonos alegrias, sonrisas y abrazos, sacando lo mejor de nosotros y poniendo a prueba nuestra paciencia. Hace un año que tenemos el enorme placer de tenerte en nuestras vidas, formas parte de nuestro dia a dia, cambiaste nuestra forma de ver todo, ahora nada es sin pensar en ti. Simplemente gracias por ser asi. Feliz cumpleañitos hermosa, te amo con mi vida!


Quisiera que sepas que suelo pensar
que cuando llegaste hubo luz de verdad
lo que conocia de pronto cambio
la forma de ver todo a mi alrededor

Y hubo lunas sin dormir
y hubo noches de emocion,
ya no se como vivir
si no es contigo

Te miro durmiendo y te quiero besar
eres todo en mi vida, te voy a cuidar
tu dolor es mi dolor
tu alegria mi pasion
el milagro de la vida con tu olor

Tus ojos que son de un color especial,
tu dulce y extraña forma de mirar,
tu risa de cielo, tus gritos de nervios,
tus pelos de punk
y tu angel y tu paz

Te miro durmiendo y te quiero besar
eres todo en mi vida te voy a cuidar
Mi Sofia.

22 de marzo de 2012

"La felicidad es pasajera, lo que no sabemos es en que estacion sube.. ni donde baja"

15 de marzo de 2012

Carta de Esculapio

Cuando entre a estudiar medicina me hicieron leer una carta escrita por Esculapio (padre de la medicina) a su hijo.. o sus hijos, todos los que pretendan seguir esta carrera. Te hace pensar, reflexionar, proyectarte, asegurarte que es esto lo que realmente quieres para tu vida, te obliga a preguntarte si realmente estas seguro. Sinceramente dude, dude mucho cuando la lei, aunque pense "no debe ser tan asi".. hasta que despues mi profesora de introduccion a la medicina la leyo en clases e iba parando en cada punto contando sus experiencias o anecdotas que corroboraban que todo lo que decia la carta era cierto. Me asuste. Dude mas aun, lo pense mucho y le di mil vueltas, pero despues de tanto esfuerzo por entrar no me podia rendir, no me puedo rendir. Ahora se que es esto lo que quiero. Estoy segura. Y estoy dispuesta a hacer cualquier sacrificio por ello. Este es mi sueño, y aunque me lleve la vida ahi estare, los sueños no pueden estar tan equivocados.



Carta de Esculapio a su hijo.


"¿ Quieres ser médico, hijo mío ?

¿ Has pensado bien en lo que ha de ser tu vida? Tendrás que renunciar a la vida privada; mientras la mayoría de los ciudadanos pueden, terminada su tarea, aislarse lejos de los inoportunos, tu puerta quedará siempre abierta a todos; a toda hora del día o de la noche vendrán a turbar tu descanso, tus placeres, tu meditación; ya no tendrás hora que dedicar a la familia, a la amistad o al estudio; ya no te pertenecerás.

Los pobres, acostumbrados a padecer, no te llamarán sino en casos de urgencia; pero los ricos te tratarán como esclavo encargado de remediar sus excesos; sea porque tengan una indigestión, sea porque estén acatarrados; harán que te despierten a toda prisa tan pronto como sientan la menor inquietud, pues estiman en muchísimo su persona. Habrás de mostrar interés por los detalles más vulgares de su existencia, decidir si han de comer ternera o cordero, si han de andar de tal o cual modo cuando se pasean. No podrás ir al teatro, ausentarte de la ciudad, ni estar enfermo; tendrás que estar siempre listo para acudir tan pronto como te llame tu amo.

Eras severo en la elección de tus amigos; buscabas a la sociedad de los hombres de talento, de artistas, de almas delicadas; en adelante, no podrás desechar a los fastidiosos, a los escasos de inteligencia, a los despreciables. El malhechor tendrá tanto derecho a tu asistencia como el hombre honrado; prolongarás vidas nefastas, y el secreto de tu profesión te prohibirá impedir crímenes de los que serás testigo.

Tienes fe en tu trabajo para conquistarte una reputación; ten presente que te juzgarán, no por tu ciencia, sino por las casualidades del destino, por el corte de tu capa, por la apariencia de tu casa, por el número de tus criados, por la atención que dediques a las charlas y a los gustos de tu clientela. Los habrá que desconfiarán de ti si no gastas barbas, otros si vienes de Asia; otros si crees en los dioses; otros, si no crees en ellos.

Te gusta la sencillez; habrás de adoptar la actitud de un augur. Eres activo, sabes lo que vale el tiempo, no habrás de manifestar fastidio ni impaciencia; tendrás que soportar relatos que arranquen del principio de los tiempos para explicarte un cólico; ociosos te consultarán por el solo placer de charlar. Serás el vertedero de sus disgustos, de sus nimias vanidades.

Sientes pasión por la verdad; ya no podrás decirla. Tendrás que ocultar a algunos la gravedad de su mal; a otros su insignificancia, pues les molestaría. Habrás de ocultar secretos que posees, consentir en parecer burlado, ignorante, cómplice.

Aunque la medicina es una ciencia oscura, a quien los esfuerzos de sus fieles van iluminando de siglo en siglo, no te será permitido dudar nunca, so pena de perder todo crédito. Si no afirmas que conoces la naturaleza de la enfermedad, que posees un remedio infalible para curarla, el vulgo irá a charlatanes que venden la mentira que necesita.

No cuentes con agradecimiento; cuando el enfermo sana, la curación es debida a su robustez; si muere, tú eres el que lo ha matado. Mientras está en peligro te trata como un dios, te suplica, te promete, te colma de halagos; no bien está en convalecencia, ya le estorbas, y cuando se trata de pagar los cuidados que le has prodigado, se enfada y te denigra.

Cuanto más egoístas son los hombres, más solicitud exigen del médico. Cuanto más codiciosos ellos, más desinteresado ha de ser él, y los mismos que se burlan de los dioses le confieren el sacerdocio para interesarlo al culto de su sacra persona. La ciudad confía en él para que remedie los daños que ella causa. No cuentes con que ese oficio tan penoso te haga rico; te lo he dicho: es un sacerdocio, y no sería decente que produjera ganancias como las que tiene un aceitero o el que vende lana. Te compadezco si sientes afán por la belleza; verás lo más feo y repugnante que hay en la especie humana; todos tus sentidos serán maltratados. Habrás de pegar tu oído contra el sudor de pechos sucios, respirar el olor de míseras viviendas, los perfumes harto subidos de las cortesanas, palpar tumores, curar llagas verdes de pus, fijar tu mirada y tu olfato en inmundicias, meter el dedo en muchos sitios.

Cuántas veces, un día hermoso, lleno de sol y perfumado, o bien al salir del teatro, de una pieza de Sófocles, te llamarán para un hombre que, molestado por los dolores de vientre, pondrá ante tus ojos un bacín nauseabundo, diciéndote satisfecho: “Gracias a que he tenido la preocupación de no tirarlo”. Recuerda, entonces, que habrá de parecer que te interese mucho aquella deyección. Hasta la belleza misma de las mujeres, consuelo del hombre, se desvanecerá para ti. Las verás por las mañanas desgreñadas, desencajadas, desprovistas de sus bellos colores y olvidando sobre los muebles parte de sus atractivos. Cesarán de ser diosas para convertirse en pobres seres afligidos de miserias sin gracia. Sentirás por ellas más compasión que deseos. ! Cuántas veces te asustarás al ver un cocodrilo adormecido en el fondo de la fuente de los placeres !

Tu vida transcurrirá como la sombra de la muerte, entre el dolor de los cuerpos y de las almas, entre los duelos y la hipocresía que calcula a la cabecera de los agonizantes; la raza humana es un Prometeo desgarrado por los buitres.

Te verás solo en tus tristezas, solo en tus estudios, solo en medio del egoísmo humano. Ni siquiera encontrarás apoyo entre los médicos, que se hacen sorda guerra por interés o por orgullo. Únicamente la conciencia de aliviar males podrá sostenerte en tus fatigas. Piensa mientras estás a tiempo; pero si indiferente a la fortuna, a los placeres de la juventud; si sabiendo que te verás solo entre las fieras humanas, tienes un alma bastante estoica para satisfacerse con el deber cumplido sin ilusiones; si te juzgas bien pagado con la dicha de una madre, con una cara que te sonríe porque ya no padece, o con la paz de un moribundo a quien ocultas la llegada de la muerte; si ansías conocer al hombre, penetrar todo lo trágico de su destino, ! hazte médico, hijo mío!"
"No es que yo fuera mala persona, es que no sabia quien era yo. Y cuando estas en esa lada oscura, estas demasiado ocupada salvandote a ti misma que no puedes ayudar a los demas. Te vuelves muy egoista."

Mesentiidentificada
"Nada de esto podria funcionar. Yo tengo mi vida y tu tienes la tuya.. y no hay nada que podamos hacer al respecto porque, lo mires como lo mires, siempre alguien saldra lastimado"